Atrapado sin salida: Mi locura es sagrada, no la toquen por Elen Helen
A 49 años del estreno de Atrapado sin salida (One Flew Over the Cuckoo’s Nest, 1975) película que consagró a Jack Nicholson y a Milos Forman como actor y director en un film que conmovió a la crítica especializada y al público en general, hoy su mirada sigue vigente.
Atrapado sin salida, es una adaptación de la novela “One Flew Over the Cuckoo’s Nest”, de Ken Kesey llevada a la pantalla grande por el director checo Milos Forman. Es el octavo film de quien fuera una figura importante de lo que se conoce como Nueva Ola Checoslovaca, para luego emigrar a Estados Unidos y consolidar allí su carrera en territorio americano.
La película fue ganadora de los cinco grandes premios de la Academia: Mejor Película, Mejor Actor en Papel Principal, Mejor Actriz en Papel Principal, Mejor Director y Mejor Guión. La frase «uno voló sobre el nido del cuco» está tomada de una rima popular infantil, que se cita en el epígrafe de la novela: «Uno voló hacia el este, otro voló hacia el oeste, uno voló sobre el nido del cuco«. Volar sobre el nido del cuco implica que alguien se ha vuelto loco, ya que la palabra “cuco” ha sido durante mucho tiempo sinónimo de tonto, loco.
Si bien esta adaptación es muy cercana a la novela, toda adaptación tal como plantea Sergio Wolf en “Ritos de pasaje”; toda transposición es una versión, una interpretación, es decir “un modo de apropiarse de ciertos textos literarios, de hacerlos propio, convertirlos, honrarlos, maniatarlos o disolverlos”.
El cine en la década del setenta estaba plagada de cine de terror, grandes obras como Repulsión del año 1965 de Roman Polanski, Psicosis (Psycho) en 1960 de Alfred Hitchcock, La naranja mecánica (A Clockwork Orange) de Stanley Kubrick crearon un clima de época propicio para que esta comedia dramática, áspera, directa y con crítica social apareciera.
En enero de 1975 se estrenó Atrapado sin salida, película revolucionaria que pone en cuestión quien está realmente loco o alienado. Una sociedad norteamericana de la década del setenta que comienza a poner en jaque el sistema de salud mental y sus métodos ortodoxos. El film plantea dos notables recorridos, la fortuna, el azar y creencias primitivas de un lado y del otro lado la ciencia, La “razón”, “la domesticación”, de un individuo adaptado a un sistema a cualquier costo.
El camino que plantea el azar hace referencia a todos aquellos hechos o circunstancias que no tienen explicación, simplemente ocurren sin previo aviso, a una persona le pueden ocurrir cosas buenas o malas sin que esta pueda predecirlo por lo cual es algo que ocurre de forma azarosa.La historia de Atrapado sin Salida gira en torno a un Randle McMurphy (Jack Nicholson), quien es trasladado a un Instituto psiquiátrico después de cumplir una breve sentencia por abuso con una joven de 15 años. Aunque en realidad no está mentalmente enfermo, McMurphy (Jack Nicholson) espera cumplir el resto de su condena lejos de la cárcel.
.Al llegar al hospital psiquiátrico se encuentra con la sala dirigida por la estricta enfermera Ratched (Estelle Louise Fletcher) quien anula las acciones de sus pacientes a través de una rutina que intimida a los pacientes.
Es, en este eje, que oscila el film, esta disputa, lucha de poder entre McMurphy (Jack Nicholson) y la enfermera Ratched (Estelle Louise Fletcher). El personaje de Jack Nicholson humaniza a los pacientes, interactúa, escucha a sus compañeros, se gana su confianza y ellos comienzan a seguirlo en sus ideas.
Milos Forman plantea el film cuál juego de barajas, una partida de poker como explícitamente pone en escena en más de una oportunidad. Ubica a McMurphy del lado de la picardía, un astuto personaje que viene a subvertir y poner en cuestión la medicalización, el uso del electroshock y las técnicas en general de la institución. Como en un juego de cartas, barajar y dar de nuevo, sacándolos de la opresión, la manipulación y el autoritarismo.
Durante gran parte de la historia, las personas con enfermedades mentales han sido marginadas, en la época medieval los comportamientos anormales se consideraban una señal de que una persona estaba poseída por demonios.
Aún en esta década, ciertas enfermedades mentales son consideradas temas tabú, con la creación de los manicomios en el siglo XIX se produjo una red de contención y control de estos cuerpos fuera de sí. Aunque los manicomios fueron famosos por sus duros tratamientos, que incluían inmovilizaciones, aislamiento, terapia de electroshock, baños de hielo, drogas forzadas e incluso lobotomías.
El film pone en escena la idea de la libertad, tanto física como mental. El comienzo nos lleva directamente al final, el plano de un paisaje natural, un remanso, como contrapunto al encierro en el que se moverá todo la película. La muerte como salida, como liberación.
Rachetd o la Génesis del Mal
Según Foucault, cuando la familia no puede controlar al individuo, se lo interna en el hospital psiquiátrico donde se somete a una estructura disciplinar para lograr su reinserción tanto en la familia como en la sociedad. El manicomio es fundamental para la sociedad racional, excluye aquello es “diferente”, lo “otro”, para mantener la disciplina en la sociedad. Plantea que en la sociedad de control los mecanismos se distribuyen a través de los cuerpos y las mentes de los hombres; los comportamientos de inclusión y exclusión social adecuados para gobernar son cada vez más interiorizados dentro de los propios sujetos.
“Historia de la locura en la época clásica” es una obra de Foucault que recoge muy bien toda esta idea de la exclusión y persecución de la locura. Foucault pone el acento en las relaciones de poder, desde su creación el manicomio se ha convertido en uno de los mecanismos de mayor vigilancia y dominio por parte de instituciones sobre el cuerpo y la mente de los individuos.
La locura, afirma Foucault, sufre tanto de una exclusión conceptual como de una exclusión física y esto refleja una condena moral.
En Atrapado sin salida, se pueden ver estas ideas en pantalla grande, principalmente en la disputa de poder que plantea Rachet-McMurphy, Milos Forman pone en escena la lucha por la verdad, o el poder de imponer una verdad y la idea de moldear las conciencias de las sociedades.
El personaje de Rachedt, enfermera transformada en cual villana de una película de superhéroes viene a representar el control absoluto. El lugar de la ciencia, del lado de la “Razón”. El más rígido de los personajes, una enfermera totalitaria, autoritaria, como sinónimo de dominación y de terror.
Rachetd se transformó en un icono de villana en el cine, al punto que Netflix produjo una serie inspirada en este personaje. Ratched es una serie de televisión de drama y terror psicológico, estrenada en el año 2020, la enfermera de un hospital psiquiátrico que se convierte en un monstruo para sus pacientes. El film casi cinco décadas después sigue siendo actual, si bien la salud mental no es un tema tabú se sigue mirando con recelo las enfermedades mentales. La película nos interpela: “¿Quiénes son los verdaderos locos?”, en una sociedad que busca atomizar, suprimir, marginar todo lo diferente, “el otro, el loco, el indio, el negro”. Una sociedad alienada sujetada a normas sociales, un sujeto sujetado perfectamente adaptado a la sociedad de la razón.